Que en un día como hoy,
con la que está cayendo, veas llegar a dos coches de alta gama, con chófer,
escolta y los altos cargos de la Junta de Andalucía a un restaurante sin el mas mínimo recato. No deja
de ser indignante, justificas casi todo, comprendes la indignación de la calle,
que haya economía sumergida y que la gente este superlativamente cabreada. Esta
gente no está en la realidad, no pueden ser representantes públicos. Para ellos
no hay desahucios, no hay crisis, no hay gente en las colas de Caritas. ¿Esta
gente donde están? En qué mundo viven, ¿con el dinero de quien se permiten
estos desmanes? ¿Quién se lo autoriza? No pueden ser representantes públicos de
Andalucía, lo pueden ser de Baviera, pero no de Andalucía
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